CAMINEMOS VALENTINA: UN LLAMADO A NO OLVIDAR

Foto de Loreto González

por Loreto González

“Caminemos Valentina” es una de esas películas que hace olvidar los aspectos técnicos porque se trata de una historia muy potente que, sin duda, despierta rabia e impotencia ante los abusos cometidos por una monja sobre varias novicias franciscanas, pero solo dos de ellas se atrevieron a denunciar y llegar hasta las últimas consecuencias.

La película está basada en el libro Raza de víboras: memorias de una novicia, de Sandra Migliore, una de las protagonistas de esta historia.  El caso salió a la luz en 2011 y recién el 2014 se publicó el libro. En él, se narra el dolor e injusticia que se viven ante este tipo de situaciones, aunque también muestra la historia de amor de la autora y Valentina Rojas, quienes se unieron en el dolor de este abuso.

UN RELATO PRUDENTE Y SIN MORBO

“Caminemos Valentina” es una película de denuncia dirigida por el argentino Alberto Lecchi, responsable de títulos como “Nueces para el amor” y “El juego de Arcibel”, en tre otras; y producida por Silvio Caiozzi, reconocido por filmes como “Julio comienza en julio” y “Coronación”, quien también se hace cargo del montaje. Además, su hija, la compositora Valentina Caiozzi, (Premio Pulsar 2019) firma la banda sonora original.

La producción argentina-chilena relata con bastante prudencia, sin caer en lo explícito, ni en lo morboso, la historia de Sandra Migliores quien a los dieciséis años ingresó como aspirante a la orden Congregación Educacionistas Franciscanas de Cristo Rey, donde fue sometida a los abusos constantes que ejercía su Maestra de formación y superior: Leopoldina (su apellido está reservado por razones legales).

Años después, ya como monja, es enviada a uno de los colegios de la congregación para desempeñarse como contralora de administración. Allí conoce a Valentina, quien renunció a los hábitos, pero igual trabaja para las religiosas. Tras una amistad surge el amor y la verdad que las une, ayudándolas a denunciar los hechos y juntar fuerzas para superar las secuelas del abuso sexual y de poder al que fueron sometidas.

EXPONER EL ABUSO PARA NO OLVIDAR

Escribir el libro y participar en este filme fue para Sandra y Valentina una manera de sanar las heridas y denunciar una historia fuertemente silenciada, porque este tipo de casos siempre son ignorados por quienes los ejercen, en este caso la iglesia y, este relato en particular, no es la excepción.

De hecho, las exmonjas realizaron la denuncia ante el Arzobispado de Buenos Aires en el pasado, cuando monseñor Jorge Bergoglio, el actual Papa, encabezaba la institución, pero lamentablemente el caso fue archivado. La agresora se refugió en Venezuela bajo un nuevo nombre y se unió a otra congregación. A pesar de los obstáculos, las mujeres han logrado sobreponerse al dolor.

La impunidad es un arma de doble filo, si bien las víctimas no han recibido la debida justicia, el llevar la historia hasta el conocimiento público a través de la literatura y el cine es un modo de exponer la realidad. Leopoldina abusó de novicias constantemente, imponía su poder y acercamiento a Dios de esa forma, era su modo también de justificar sus actos.

“Caminemos Valentina” es mucho más que una película; es un llamado a la reflexión sobre la responsabilidad de la Iglesia Católica en la protección de sus miembros y en la adaptación a los cambios de la sociedad. La realización de Alberto Lecchi nos ayuda a no olvidar, ni a perpetuar el silencio y la impunidad.

FICHA TÉCNICA

  • Título original: Caminemos valentina.
  • Género: drama.
  • Dirección: Alberto Lecchi.
  • Productores: Luis Sartor (Argentina) – Silvio Caiozzi y Guadalupe Bornand (Chile).
  • Productores Asociados: Luis Schenone, Diego Turdera, Pablo Topet, Jonathan Daniele, Sandra Migliore, Valentina Rojas (Argentina) – Edgardo Viereck (Chile).
  • Elenco: Paula Sartor, Roxana Naranjo, Gabriela Robledo, Jacinta Torres, Sara Margot, Lidia Catalano, Víctor Laplace.
  • Guión: Daniel Romañach y Alberto Lecchi.
  • Música original: Valentina Caiozzi